Juventud y organización social: ¿Qué nos deja el movimiento #Yo Soy 132?

Resumen

Esta reflexión en su momento, representó un ejercicio propio por ubicarse en el tiempo, en el espacio, pero sobre todo en un contexto político muy específico, el de una coyuntura que cimbró fuertemente en el 2012 a buena parte de la juventud mexicana. Algunos hemos reflexionado en conjunto que probablemente después del movimiento estudiantil de 1968, el 132 constituyó por lo menos el movimiento juvenil más extendido en el país.

Aquí pretendemos registrar nuestros actos, como análisis, relatos y afectividades. Tal vez lúdicamente se intentó historiar desde abajo, desde una juventud que cada vez está más desesperada por salir del atolladero y desde una juventud que quisiera ofrecer a los que vienen una esperanza de transformación política en este México donde nosotros somos el blanco fácil. Para eso sirve la historia en el bachillerato y en cualquier otro espacio del que estemos involucrados, para saberse parte de la historia; hacedores de historia. Historiar es un ejercicio cotidiano que hacemos todos en distintas medidas, pero como todo ejercicio, la parte lúdica de él, nos permite enriquecer el futuro.