En este artículo se aborda el tema de los foros en línea, principalmente los de la asignatura Problemas filosóficos de B@UNAM, pues son el espacio donde se ejerce la actitud dialógica, sobre todo en el foro de racionalidad política, el cual implica realizar trabajo cooperativo. Los estudiantes que llevaron la asignatura son de una escuela incorporada a la UNAM, el Liceo Intercultural Mexicano, que se encuentra en la ciudad de Querétaro, México. Con ellos, se aplicó la estrategia del aprendizaje colaborativo, situado y experiencial.

El objetivo de la estrategia didáctica fue fomentar el trabajo colaborativo en los foros en línea, por medio de WhatsApp, para que el estudiante utilizara la actitud dialógica en la solución de problemas sociales. La presente estrategia de aprendizaje se fundamenta en las tesis de Onrubia (Coll et al., 2007), sobre zonas de desarrollo próximo; en el aprendizaje experiencial de Díaz-Barriga y Hernández Rojas, (2007), así como en las ideas Luna Dávila (2013) sobre los foros en línea educativos. Todas las anteriores tienen como fundamento el constructivismo. También son relevantes las ideas de Cortina (2000) sobre la actitud dialógica, fundamento de las Morales del diálogo. Primero se empezará con las bases teóricas arriba mencionadas para después describir la estrategia que se aplicó.

El constructivismo es el paradigma pedagógico que se sostiene en un conjunto de teorías psicoeducativas, pedagógicas, cognitivas y socioeducativas que se fueron consolidando en los siglos XX y XXI. Una de estas teorías es la del aprendizaje situado que tiene como tesis principal aprender haciendo y sostiene que todo conocimiento está situado, esto es, que el conocimiento se genera a partir de una situación determinada y un contexto social específico, y que responde a una problemática real, social o natural. Otro elemento es la creación de las zonas de desarrollo próximo (ZDP), en la que los estudiantes con más habilidades cognitivas ofrecen una ayuda didáctica a los menos hábiles. Onrubia considera: “La ZDP, es el lugar donde, gracias a los soportes y la ayuda de los otros, puede desencadenarse el proceso de construcción, modificación, enriquecimiento y diversificación de los esquemas del conocimiento que define el aprendizaje escolar” (2007, p.106). Así, en el momento que el docente o asesor en línea invita a los estudiantes a la conformación del trabajo en equipos, donde el estudiantado construye y modifica su esquema de conocimiento. Otro de los fundamentos teóricos es el aprendizaje experiencial, cuyo objetivo es articular o unir estrechamente la escuela con la vida. Su lema es aprender a través de la experiencia, pero no de cualquier experiencia, sino de aquella que sea relevante, de la que se pueda obtener un aprendizaje significativo, esto es, que tenga sentido para el estudiante y lo pueda aplicar en la solución de problemas reales, sociales o culturales.

Frida Díaz-Barriga define y refiere:

El aprendizaje experiencial es un aprendizaje activo, utiliza y transforma los ambientes físicos y sociales para extraer lo que contribuya a experiencias valiosas y pretende establecer un fuerte vínculo entre el aula y la comunidad, entre la escuela y la vida. Es decir, es un aprendizaje que genera cambios sustanciales en la persona y su entorno. A través de este se busca que el alumno desarrolle sus capacidades reflexivas y su pensamiento, así como el deseo de seguir aprendiendo en el marco de los ideales democráticos y humanitarios (2006. p. 3).

Por lo tanto, el aprendizaje experiencial es uno de los elementos importantes para hacer realidad el proceso democrático, pues el estudiantado relacionará y reflexionará sobre sus experiencias a partir de aquello que aprendió, con ello, estaría en posibilidad de lograr un conocimiento significativo.

Los foros en línea educativos son herramientas que se hicieron posibles a partir del desarrollo de la Web 2.0 y que han sido de gran utilidad para que el estudiante desarrolle habilidades comunicativas y dialógicas. Además, pueden usarse de diferentes formas, desde ser un foro de presentación hasta abordar y polemizar un tema; por ende, cumplen multifunciones.

De ahí que deben permitir que los estudiantes interactúen entre ellos, se relacionen socialmente, ya sea de manera espontánea o siguiendo las instrucciones que proporciona el profesor; o bien, por medio de preguntas previamente formuladas, motivando a la participación, orientando la discusión, promoviendo el discurso coherente o fomentando la unión del grupo, etcétera (Luna Dávila, 2013, p 147).

Otra de las habilidades que desarrollan en los foros es la argumentativa, de ahí su importancia que el estudiantado ofrezca razones sobre las preguntas detonadoras que dan lugar al debate; también se fomenta la actitud dialógica, uno de los elementos de la Ética mínima de Adela Cortina; además del fundamento de la Moral dialógica, esto es, llegar a acuerdos racionales, lo que permiten estos foros. Según Adela Cortina, es “(…) una racionalidad que no se muestra ya en el hecho de que los hombres se den a sí mismos leyes propias, no extraídas de la naturaleza ni de la religión, sino en la disponibilidad para decidirlas, para justificarlas, a través del diálogo” (Cortina, 2000. p 59). De ahí que la actitud dialógica sea una disposición para llegar a acuerdos racionales, en los cuales los participantes se involucren en su concreción.

Ahora se explicará cómo estos elementos teóricos se encuentran en la asignatura de Problemas filosóficos, ubicada en el tercer módulo de B@UNAM y en la estrategia didáctica que se aplicó. Incluye 13 foros que abordan diferentes temas, desde diferenciar entre filosofía, mito-religión y ciencia hasta compartir obras maestras. Allí los estudiantes interactúan y comentan si se trata de obras maestras o no. Uno de los foros es el de racionalidad política, donde se aplicó la estrategia del aprendizaje situado. Se consideraron dos dimensiones: la de relevancia cultural, que se encuentra en el contenido de la plataforma, en la que le explican al estudiante los elementos teóricos de las formas de gobierno según Weber: dominación tradicional, carismática y racional. Se aportan ejemplos de cada una, así como cuadros e imágenes que ilustran los temas. Por otro lado, está la dimensión social, que se refiere a solucionar problemas reales, por medio del debate o de juegos. En el caso del foro de la racionalidad política existe un debate: los estudiantes se organizan en equipos, a partir de la respuesta que ofrecen sobre si existe o no la racionalidad política en México o su municipio o estado. La actividad permite que los estudiantes aprendan por medio de una experiencia relevante, en este caso, la experiencia política de qué es lo que han observado de las autoridades, de los políticos, de la propia comunidad, en el ejercicio del poder político; asimismo, cómo han participado las ONG para hacer posible una sociedad democrática y de avanzada, para que relacionen esta experiencia valiosa, con los elementos teóricos de Max Weber.

En educación a distancia se presenta el problema de que los estudiantes tardan en enviar su respuesta sobre el tema, aunque se les envía mensajes por el chat de la plataforma de Moodle para que cumplan a tiempo. Pasado ese tropiezo, una vez que lo hicieron, se organizaron en equipos de tres integrantes.

La instrucción de la actividad señalaba que podían realizar el debate por medio del chat de la plataforma, lo podían grabar, o bien, utilizar alguna de las redes sociales que conocieran. Como tardaban en subir sus aportaciones al foro de la racionalidad política, se les mandó otro mensaje por chat y algunos comentaron que no podían subir el debate porque el vídeo estaba muy pesado. Se les sugirió que lo hicieran por WhatsApp, para que el debate se diera en tiempo real, haciendo más dinámica la experiencia. Una vez terminado, lo copiaron y lo pegaron en un documento Word para subirlo a la plataforma. Lo interesante de la actividad fue que se dio trabajó en la ZDP y se propició la ayuda entre iguales. Cuando alguno de ellos se vio más competente para llevar a cabo las preguntas del debate, otros argumentaron, dieron razones sobre el tema que se abordó, y lo más importante es que establecieron un acuerdo o llegaron a una conclusión consensuada por los tres integrantes.

También se observó el trabajo colaborativo o por equipos y la actitud dialógica, pues mediante el diálogo racional llegaron a determinados acuerdos y reflexionaron sobre la democracia en México y los problemas que enfrenta. Otro de los aspectos relevantes es que en este foro el estudiante recupera su experiencia, lo que ha observado del ejercicio del poder político en su comunidad. Esto lo relaciona con la teoría de Weber sobre la dominación racional política, que se distingue por ser un Estado de derecho, donde la Constitución es su fundamento. Ahí está el aprendizaje experiencial del que nos habla Frida Díaz Barriga. En la instrucción de la actividad, se les indica a los estudiantes que comenten los debates de sus compañeros, aunque pocos lo hacen.

De nuevo, en la labor de asesoría, se les tuvo que mandar mensajes a todos, invitándolos a participar y, en el mensaje de avance académico, una frase que se les envió fue: ¡Vamos, vamos, participa en el foro! ¡Recuerda que tenemos que fomentar el trabajo colaborativo y la actitud dialógica, tan indispensables en nuestra sociedad!

En el papel de asesores, ocurren dos tipos de funciones: la académica, con la retroalimentación a las actividades que suben, aclarando dudas, y la segunda, la motivacional, esto es, incentivándolos para que continúen sus estudios, o bien, que corrijan una actividad.

En suma, el grupo donde se aplicó la estrategia arrojó buenos resultados, pues de los nueve estudiantes reunidos para dicho análisis todos participaron en el debate y fomentaron el trabajo colaborativo, pues se organizaron en equipos y dieron ejemplos sobre los políticos mexicanos, analizaron sus experiencias políticas y llegaron a acuerdos sobre cómo actuar frente al poder político de su comunidad, como ciudadanos conscientes y participativos. Esto último representa la concreción del aprendizaje experiencial.

Para finalizar, se sugiere habilitar un botón calificador en los foros en línea de Moodle para que los estudiantes puedan evaluar el debate de sus compañeros, pues se requiere de una coevaluación y retroalimentación entre los participantes.