Situaciones de emergencia prolongadas y obesidad
Contenido principal del artículo
Resumen
El estrés es una respuesta del organismo ante situaciones que implican peligro, reto, amenaza o agresión, es decir, ante situaciones de emergencia o riesgo para la integridad del organismo o su supervivencia. Esa respuesta implica la activación del eje hipotálamo-hipófisis-suprarrenales que libera cortisol, y del sistema simpático que libera, entre otras hormonas, adrenalina y noradrenalina.
Es decir, ante situaciones de emergencia que suponen un tiempo breve el organismo responde con mayor intensidad, ello requiere de mucha energía, ya sea para enfrentar el ataque o para escapar.
Sin embargo, existen situaciones de tipo social, como las condiciones nocivas de trabajo, que la persona se obliga a soportar en el intento de garantizar su sobrevivencia y las de sus seres queridos que le obligan a mantenerse expuesto de manera constante a ellas y que presuponen la activación constante, prolongada de los ejes de funcionamiento de su organismo. Dicha activación crónica da lugar a alteraciones metabólicas y funcionales que, a su vez, dan lugar a las denominadas enfermedades crónico-degenerativas, que son aquellas de las que más enferman y mueren las personas de la clase trabajadora en nuestro país, entre ellas la obesidad, asociada, por cierto, a la hipertensión arterial, la cardiopatía isquémica, la diabetes mellitus y el cáncer, entre otras. En este trabajo se presentan algunos de los mecanismos implicados en la aparición y desarrollo de la obesidad en las situaciones de emergencia prolongadas, como son las condiciones nocivas de trabajo que en las últimas décadas han empeorado de manera significativa, convirtiendo a las situaciones de estrés prolongado del trabajo en una verdadera amenaza para la salud de las y los trabajadores.